Wednesday, November 09, 2005

 

Jesús en la Eucaristía nuestro compañero

El Jesús de la mañana es el Dios que regocijo mi juventud, es el Dios cuya presencia tiene la dulzura y la claridad del alba sobre el horizonte.
En la mañana de mi vida Jesús tomó posesión de mi mediante el bautismo. En la mañana de mi adolescencia vino a mi en la luz de mi primera
Comunión, se levantó la hostia radiante como el sol, así en cada día renace para mi la EUCARISTIA, como el maná del desierto escondido en el tabernáculo. Cada día yo recibo a Jesús de la mañana, más os deseo y más os amo.
El Jesús de la tarde es el Jesús de Emaus, yo veo que la noche va cayendo sobre mi vida, y a lo largo de la ruta descubro el abismo de mi vida.
Pero yo no estoy sola en el camino, en la sombra al lado mío camina el Jesús de la tarde. El me habla y reanima mi FE, entona mi esperanza y calienta mi corazón. Ese Jesús es el Dios de la EUCARISTIA. que me alumbra, me fortalece y me consuela.
OH¡ cuánto necesito de EL, mira pués oh, buen Maestro mira las sombras que se extienden sobre mi ruta. El Jesús de la tarde es el Dios que después de haber alegrado mi juventud dulcemente encamina mi vida a la vejez y a la muerte. Pero por sobretodo en la tarde de mi vida es cuando siente el alma que lo Divino se viene acercando y caen sobre ella los soplos de la
ETERNIDAD.
Oh´ Jesús de la tarde que mis postreros cantos sean benditos por todas las alegrías de mi vida. SEÑOR JESUS¡ sé que té volveré a encontrar en el hermoso cielo, donde no hay noche, y ya no seréis mi Jesús de la tarde, si no que siempre seréis mi JESUS DE LA GLORIA ETERNA.

Comments: Post a Comment



<< Home

This page is powered by Blogger. Isn't yours?